Las vistas desde la habitación al valle eran impresionantes, y la cena en el restaurante fue una experiencia espectacular con un ambiente muy agradable.

me sentí bien atendido, no tengo ninguna queja en absoluto.

Las vistas desde la habitación al valle eran impresionantes.

Lamentablemente, nuestra experiencia no fue la mejor. La ducha tenía un desagüe que no funcionaba correctamente, lo que causó inundaciones en la habitación. Además, la señal de móvil era nula y el wifi no servía, dejándonos completamente incomunicados. Siento que el servicio ha bajado considerablemente, ya que parece que el restaurante ha desviado toda la atención y prioridad a su nueva estrella MICHELIN, dejando el hotel en segundo plano.

Una experiencia gastronómica inolvidable

Disfrutamos de un menú degustación espectacular, con cada plato siendo una obra de arte. La atención del personal fue de primera, siempre dispuestos a ayudar y explicando cada detalle del menú. Recomiendo reservar con antelación para disfrutar de esta joya culinaria.

Las rosquillas en el desayuno son una maravilla! Además, la cama era increíblemente cómoda, perfecta para descansar después de un día explorando. La terracita de la habitación ofrece unas vistas espectaculares del valle, ideal para disfrutar un café al amanecer.

Aunque encontramos algunas telarañas en la habitación, la verdad es que eso no opacó la belleza del lugar. Todo estaba tan bonito y acogedor que era fácil olvidar esos pequeños detalles.

Las vistas al valle son increíbles. El Wi-Fi es muy lento.

El entorno es ideal para desconectar, con vistas impresionantes al río Guadalaviar. Las habitaciones son amplias y luminosas, perfectas para disfrutar del aire fresco en la terracita.

El desagüe de la ducha no traga bien, provocando inundaciones en la habitación. No había cobertura de móvil y el wifi funcionaba mal, dejándonos incomunicados. La limpieza dejó que desear, con telarañas en el techo y un tapón de bañera atascado, haciendo que la experiencia de la habitación fuera menos agradable.

la cama es increíblemente cómoda y permite un descanso reparador. en el desayuno, algunas veces el personal no es muy atento.

el entorno es espectacular, junto al río y con un ambiente acogedor. la habitación era luminosa y estaba muy bien decorada. el desayuno, además de un buffet completo, ofrece opciones de huevos recién preparados, lo que es un gran detalle.

la conexión wifi es lenta a veces. 📶

escapada tranquila con vistas impresionantes

entorno natural, decoración acogedora

Wi-Fi lento

La cama era muy espaciosa y nos permitió descansar bien, especialmente con nuestro bebé de 3 meses. Apreciamos mucho la terracita de la habitación, ideal para disfrutar del aire fresco. La ubicación es espectacular. se puede acceder fácilmente a actividades al aire libre en la Sierra de Albarracín, lo que hizo nuestra estancia aún más agradable.

El entorno es espectacular, con vistas impresionantes y un restaurante que ofrece una cena gastronómica excepcional. Sin embargo, la habitación tenía problemas con la ducha y el wifi, lo que afectó la experiencia. Aún así, considero que este lugar merece una visita por la calidad de su comida.

La experiencia gastronómica en el restaurante es increíble. el menú degustación sorprende en cada plato. La cama era comodísima, perfecta para dormir con nuestro bebé, pero la limpieza en la habitación podría mejorar un poco. Además, disfrutamos de una clase de cocina local que fue muy divertida.

Comida memorable y un entorno encantador

Pasamos un fin de semana en un lugar espectacular, rodeados por la Sierra de Albarracín. La cena fue una experiencia gastronómica extraordinaria, con un menú que nos sorprendió en cada plato y un maridaje de vinos que realzó cada bocado. Además, el desayuno, aunque podría ser un poco más variado, tenía opciones frescas y de calidad. La única mejora que sugeriría sería un servicio más cálido y menos apresurado durante la cena, que se prolongó durante tres horas.